Cómo Colocar un Vinilo en una Pared

La colocación de vinilos en las paredes es una forma creativa y efectiva de dar una nueva vida a tus espacios sin la necesidad de grandes obras. A continuación, te guiaremos paso a paso para que puedas lograrlo de manera exitosa. Comenzaremos con la preparación previa necesaria y continuaremos con la eliminación de las burbujas, cada detalle cuenta cuando se trata de decorar con vinilos. ¡Así que prepárate para darle un toque único a tus paredes sin preocuparte por las burbujas!

Preparación Previa

Antes de comenzar con esta emocionante tarea de dar una nueva vida a tus paredes con vinilos decorativos, es realmente importante realizar una correcta preparación. Esta etapa es fundamental para garantizar un resultado perfecto y sin burbujas. Vamos a ver ahora los tres aspectos clave de la preparación previa: la preparación de la pared, del vinilo y la recopilación del material necesario.

Prepara la Pared

El primer paso y uno de los más importantes es preparar la superficie en la que deseas aplicar el vinilo, ya que esto hará que la adhesión sea correcta y permanezca en su lugar sin futuras caídas. Es importante recalcar que si la pared tiene gotelé o ha sido pintada recientemente, debemos esperar un rango de 2 a 3 semanas para que la pintura esté completamente seca. Antes de proceder con la aplicación del vinilo, limpia la pared con un paño seco para eliminar el polvo y la suciedad que puedan afectar la adherencia.

Prepara el Vinilo

Cuando compramos un vinilo, este suele venir enrollado para ocupar menos espacio. Una vez estemos en casa, es importante desempaquetarlo con cuidado y colocarlo en una superficie plana con peso durante un tiempo para que este quede totalmente plano. Este paso es realmente importante para evitar que el vinilo se deforme cuando lo instalamos.

Prepara el Material que Vas a Necesitar

Una vez hayas preparado el vinilo, es importante reunir el material para tener un proceso de instalación sin problemas. Asegúrate de tener a mano una espátula especial para vinilos, que deberá ser rígida si el vinilo se va a instalar sobre una superficie lisa o de gotelé. Si estás pensando si comprar o no comprar la espátula, te recomendamos hacerlo, ya que es una herramienta fundamental para una aplicación exitosa. Además, necesitarás cinta de carrocero de buena calidad.

Una vez que hayas completado esta pequeña pero necesaria preparación previa, estarás listo para avanzar en el proceso de colocación del vinilo en la pared.

Coloca el Vinilo

Una vez que hayas realizado la preparación previa adecuadamente, llega el momento de adentrarse en el emocionante proceso de la colocación del vinilo en tu pared. En esta etapa, detallaremos los pasos esenciales para garantizar que tu vinilo se adhiera de manera uniforme y sin la aparición de las burbujas molestas. Estos son los elementos clave a considerar: la toma de medidas, el repaso del vinilo, la colocación sobre la pared y la eliminación del transportador.

Coge las Medidas Correctamente

Antes de ponerte con la instalación del vinilo, es muy importante tomar las medidas de la forma más precisa posible. Esto implica medir tanto el vinilo como la zona de la pared en la que planeas colocarlo. Gracias a estas medidas podrás determinar la ubicación exacta donde lo vas a instalar para garantizar que el vinilo quede totalmente nivelado. En este proceso se recomienda usar un lápiz suave para marcar con cuidado el punto de referencia en la pared, ayudándote a posicionar el vinilo de la mejor manera posible.

Repasa el Vinilo

Por norma general, los vinilos decorativos suelen constar de tres capas: el papel transportador, el vinilo en sí y el papel siliconado de soporte. Antes de proceder con el pegado del vinilo en la pared, repasa el mismo con una espátula sobre una superficie lisa, aplicando presión para asegurarte de que el vinilo esté firmemente adherido al transportador. Esto facilitará la eliminación del papel siliconado en el futuro.

Colócalo Sobre la Pared

Ahora llega el momento de la colocación del vinilo, lo primero será retirar ligeramente el papel siliconado del vinilo desde la parte superior, doblando hacia atrás y hacia abajo. A continuación coloca el vinilo en la posición que desees y pega la zona desnuda contra la superficie que desees instalarlo aplicando presión con la espátula. Luego utiliza cinta de carrocero para fijar temporalmente el transportador a la pared mientras trabajas en el resto del vinilo.

En este proceso es muy importante realizarlo todo con sumo cuidado y paciencia, retirando el papel siliconado de forma gradual desde arriba hacia abajo y desde el centro hacia los bordes. Esto ayudará a evitar la odiosa formación de burbujas.

Quita el Transportador

Ya queda poco, una vez esté pegado todo el vinilo y haya sido retirado el papel siliconado, llega el momento de eliminar el transportador. Asegúrate de dar el último repaso con la espátula para que quede bien liso y adherido. Luego, con cuidado, comienza a retirar el transportador lentamente desde la parte superior hacia abajo.

Este proceso hará que el vinilo quede perfectamente aplicado a la pared, sin ninguna burbuja ni imperfecciones de ningún tipo. Si en algún momento ves que aparecen burbujas, puedes eliminarlas con cuidado usando una aguja y la espátula, eliminando así el aire atrapado para que el vinilo quede perfectamente plano.

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Con estos sencillos pero importantes pasos, lograrás que la colocación de tu vinilo quede perfecta. Tu espacio lucirá totalmente nuevo y único, y lo mejor es que, si algún día decides cambiar la decoración, podrás retirar el vinilo con una pistola de aire caliente sin dejar rastros en la pared. ¡Disfruta de tu nueva decoración creativa!